La Asociación de Interinos Docentes de la Región de Murcia asegura que “como cada verano los docentes en expectativa de destino y los interinos deben rellenar el tan tedioso como temido acto de adjudicación”
Nuevo lío en la adjudicación de plazas para el curso escolar 21/22. La Asociación de Interinos Docentes de la Región de Murcia (AIDMUR) ha denunciado que el proceso de adjudicación está resultando “tedioso y parece concebido para dificultar su comprensión”. El proceso de adjudicación de plazas se realiza de forma telemática, con ayuda de una aplicación informática para ordenar por orden de preferencia las plazas que están libres y que pueden ser ocupadas al empezar septiembre, pero en esta ocasión, tal y como señala la portavoz de AIDMUR, Encarna Martínez, “la Consejería ha decidido que aparezcan para ordenar todos los dobles perfiles relacionados con la especialidad de cada docente, aunque el docente en cuestión no esté habilitado para alguno de ellos”. Además, la asociación de interinos docentes asegura que el doble perfil “aparece en observaciones, con una letra pequeñísima y, en el caso de combinar dos plazas, ni se ve en la aplicación si no repasas de forma muy minuciosa el documento final (en algunos casos compuesto de 800 plazas)”. Aparece además “una amenaza de penalización”, que tiene el único objetivo de desalentar a quienes participan en el proceso.
Desde AIDMUR consideran “una crueldad” esta práctica, ya que “lo único que busca es provocar que el docente se equivoque”, de forma que se establezca una “criba ilegal y no reconocida” con la que justificar la expulsión de profesionales de las listas de empleo, ya que “lejos de ampliarse las plazas, se están recortando en todos los centros públicos”. Para la portavoz de AIDMUR, este despropósito “es consecuencia directa” de haber vendido la Consejería de Educación a cambio de su apoyo a López Miras “a una diputada tránsfuga de extrema derecha, sin capacidad de gestión y que no conoce en absoluto el funcionamiento de la educación pública”. Señalan además que en el “caótico sistema diseñado” se producen errores como que si alguien pide por error una plaza para la que no está habilitado, un docente que esté detrás y que sí cumpla los requisitos, ya no pueda optar a ella en ese acto, cuando por puntuación le correspondería”. Un error que además hará que determinadas plazas queden sin cubrir a principio de curso, retrasándose aún más su cobertura y añadiendo así más caos a los centros“.
Para Encarna Martínez, es “incomprensible” que esas plazas no sean retiradas de la aplicación para las personas que no puedan impartirlas, máxime cuando las plazas puras de una especialidad “sí se retiran sin problema alguno”. Se trataría por tanto de un problema de dejación de funciones sobre un colectivo que ya sufre una inestabilidad laboral y que además en la mayoría de casos se encuentra en fraude de ley. Además, rechazan cualquier tipo de sanción sobre los docentes debido a errores que “son de la Consejería, que es quien no está haciendo bien este proceso”. “Este caos solo se arregla con la repetición de todos los actos erróneos y con la vuelta de todos los docentes afectados a sus listas originales” ha concluido la portavoz de AIDMUR.