El consejero de Educación, Pedro A. Sánchez, se sigue escondiendo de los docentes interinos de la Región de Murcia.
Tras las reiteradas solicitudes para ser recibidos, Sánchez demuestra que el diálogo no va con él y son ya varios meses en los que la Consejería de Educación ha cerrado sus puertas a sus trabajadores.
Queremos denunciar que al menos con el anterior Director General de RRHH, Joaquín Buendía, existían vías de comunicación más o menos fluidas, pero con el nuevo titular, Enrique Ujaldón, éstas son ya inexistentes, por no hablar que el consejero hace más de un año que sigue la estrategia del avestruz.
Este gravísimo y antidemocrático comportamiento es indigno de cualquier representante público, que entre sus responsabilidades está la de escuchar a sus representados. Si creen que así nos van a silenciar andan muy errados, pues no vamos a dejar de denunciar que este consejero imputado maltrata a los docentes interinos de la Región hasta el punto de discriminarles.
Y más indignante es su actitud cuando solo pedimos diálogo y que cumpla con su promesa de solucionar los problemas con consenso. Sospechamos que el proceder del consejero Sánchez obedece a un atisbo de vergüenza y mala conciencia por haber traicionado su propia palabra y por haber impuesto una situación de precariedad que nunca vamos a aceptar.
Por otro lado, denunciamos que la Consejería de Educación aún mantiene deudas con los docentes que asumieron la atención domiciliaria desde enero a junio de 2014. Estamos casi a falta de un mes para llegar al 2015 y Educación adeuda unas retribuciones devengadas hace meses. Lo peor es que la Consejería guarda silencio sobre este asunto y sigue sin pagar a los docentes que han atendido al alumnado que ha necesitado de este programa domiciliario para recibir atención educativa.
Es inadmisible una situación en la que la Consejería continúa con el maltrato hacia los docentes, que han dedicado su esfuerzo y voluntad para que estos alumnos reciban la atención que merecen, muchas veces con contratos precarios, lo que agrava más la situación vergonzosa y lamentable a la que ha sumido esta Consejería a los interinos de la Región de Murcia. Una vez más, la Consejería no está a la altura de las circunstancias.